27.8.08

José Mari se acomoda solemnemente los zarcillos verde pino con forma de caracola que le tocaron en una bolsa de Ruffles en Benalmádena en 1987 y, como cada noche, interpreta en el karaoke municipal sin moverse de la mesa seis Háblame, del mar marinero. Por si vuelve.

21.8.08

[Abrazados a la vigencia de tu palabra rebelde]

¡¡Clonáte!! le gritaron desde la platea.

Qué complicado escribir sencillo le había regañado un gallego.


Eduardo Galeano, incansable defensor de la historia con minúscula, la de los pueblos inadecuados.